Os voy a presentar hoy a Eva, la perra de mi amiga Amparo, aquí la tenemos cuando era Evita,
ahora por supuesto es EVA, con mayúsculas porque es una enorme y preciosa hembra de dogo argentino.
Desde aquí felicitar a Amparo y su marido por tener este espléndido animal, guapa y elegante, y no sólo eso, sino que Eva fue adoptada, sacada del refugio y ahora vive feliz en un buen hogar, con su amiguito Tonet, que ya os presentaré, es traviesa y juguetona, ¿quien habló de perros peligrosos?, sólo existen dueños peligrosos, a pesar de que el dogo argentino está en la lista de perros potencialmente peligrosos, es un amor de animal.
El dogo argentino es un perro amistoso con la gente y que establece un vínculo fuerte y duradero con su amo y su familia. Es ideal para convivir con niños porque tolerará que le tiren de la cola, que se le suban encima, sin emitir un solo gruñido, no nos equivoquemos, no es que le vaya a gustar mucho, pero no se quejará.
Es una raza dócil, respetuosa y afable, y es triste que en Gran Bretaña no esté permitida, por considerarla un pitbull gigante, las ignorantes autoridades caninas, han establecido leyes bastante dañinas prohibiendo de este modo muchas razas de fantásticos perros de compañía.
Suele ser un perro muy activo, se aburre con facilidad, os voy a poner la prueba, en qué ha convertido Eva lo que en principio fue un hueso para mordisquear, pero mejor que se dedique a esto y no a destrozar la casa.
Eva, Eva....
Pero Amparo sabe que tiene una raza de perro que se caracteriza por ser equilibrado, fiel, valeroso, inteligente y discreto.
Además es importante destacar que es perro de una sola familia, una vez establece lazos con ella, no reaccionará muy bien ante los cambios, si se le aparta de ella pueden sufrir gran ansiedad y depresión.
En definitiva es un impresionante animal, fuerte, musculoso, y que no tiene apenas competencia en cuanto a valentía, tenacidad e inteligencia.
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